Puede que las conexiones inalámbricas nos hayan permitido disfrutar de nuestros dispositivos móviles de forma mucho más cómoda, pero hay ocasiones en las que una buena conexión con cable de red es deseable.

El tamaño del puerto RJ45 para las conexiones Ethernet en sus distintas variantes es un problema, y eso ha hecho que desde hace años la mayoría de portátiles y ultraportátiles no incluyan estos puertos. No obstante hay soluciones ingeniosas que nos recuerdan al arte del origami y que demuestran que integrar puertos Ethernet es posible en esos equipos ultradelgados.

Lo demuestra el Fujitsu Lifebook U937, un equipo ultraligero de tan solo 920 gramos que cuenta con una configuración destacable. Contamos con un procesador que puede ir desde un Core i5-7200U hasta un Core i7-7600U, además de hasta 24 GB de RAM, unidad SSD que puede ser una PCIe de hasta 512 GB, varios puertos USB-A, un USB-C (USB 3.1) y un lector de huella dactilar.

La sorpresa está en que a pesar de su grosor, de tan solo 15,5 mm, este fabricante ha integrado un puerto RJ45 de tamaño completo para conexiones Ethernet 10/100/1000. Para conseguirlo ha acudido a un ingenioso mecanismo que “despliega” el puerto como si de un pequeño origami de papel se tratase.

Ese puerto tiene el comportamiento de una pequeña bandeja desplegable. Al extraerla y desplegarla se presenta ese curioso puerto Ethernet que es una verdadera sorpresa de este diseño, aunque eso sí, probablemente sea mejor tener cuidado al usarla o mover el portátil mientras lo tenemos conectado a un cable Ethernet porque parece un elemento delicado de ese diseño.

Los adaptadores también solucionan la papeleta

El mecanismo no es del todo nuevo, y algunos portátiles han utilizado ideas similares. Es el caso de algunos Dell Latitude 7000, que también cuentan con uno de estos puertos, pero en lugar de extraerlos y desplegarlos basta con sacar una pequeña pestaña que “eleva” el portátil y muestra ese puerto Ethernet.

La conectividad Ethernet es especialmente relevante para portátiles gaming, y estos modelos suelen contar con diseños menos delgados en los que sí es posible integrar este tipo de puertos sin problemas, pero incluso en esos casos hay modelos delgados que también hacen uso de mecanismos de este tipo para integrar estos puertos.

La opción en aquellos ultraportátiles convencionales que no cuentan con esta conexión es, claro, el uso de adaptadores. Los que permiten acceder a puertos Ethernet vía interfaz USB 2.0 y 3.0 tanto con los puertos USB-A convencionales como con los puertos USB-C son ya muy fáciles de encontrar en el mercado. De hecho lo normal es ofrecerlos con hubs que además ofrecen otros puertos adicionales, pero aún así resulta llamativo y curioso encontrar soluciones como las que proponen Fujitsu o Dell en alguno de sus modelos actuales.